Shaolin y las A.M.

Por HUO JIANYING
 DEL siglo VII al XVII hubo en China un contingente de reacción rápida, que se destacó entre las huestes militares de entonces porque sus integrantes no eran soldados profesionales, sino monjes del Templo Shaolin adiestrados en las artes marciales. A pesar de no ser más que un ejército de reserva, su fama llegó a los más alejados confines, merced a la cantidad de victorias consecutivas, que acumularon durante unos mil años. En la actualidad, entre las estelas legadas por varias dinastías en el monasterio de Shaolin, hay algunas que relatan las hazañas de los monjes guerreros de ese templo. Considerada la reliquia más valiosa del lugar, la estela del emperador Li Shimin (creador de la época próspera de la dinastía Tang) menciona las contribuciones hechas por los monjes de Shaolin a la fundación de la dinastía Tang, así como los encomios que le concedió el emperador.
  Los 13 monjes y el emperador de Tang
La dinastía Sui (581-618) fue derrotada por los levantamientos campesinos, pero la guerra no terminó con su caída. Las diferentes facciones militares siguieron disputándose el trono. En el año 621, Li Shimin, con sólo 21 años de edad a la sazón, dirigió sus tropas hasta la ciudad Luoyang para enfrentar a Wang Renze, caudillo de otra facción militar, quien había cometido atropellos contra los lugareños y se había apropiado de la tierra cultivable del monasterio Shaolin. La batalla no fue fácil para Li, pues el ejército de Wang era también valiente. Los 13 monjes guerreros de Shaolin encargados de proteger los bienes de Shaolin decidieron rectificar la injusticia y ayudar a Li. Aprovechando sus habilidades en las artes marciales, entraron en la ciudad protegidos por las sombras de la noche y lograron capturar vivo a Wang Renze. Los monjes de Shaolin se anotaron hazañas en esta batalla. La película El Templo Shaolin, que se hizo famosa en el mundo a principios de los 80, se basó en este hecho histórico. Después de subir al trono, Li Shimin concedió a Shaolin 260 hectáreas de tierra y un rodillo de piedra (instrumento antiguo para procesar cereales) además de pronunciar encomios oficiales. Más tarde publicó un edicto imperial en el cual otorgaba cargos oficiales a los 13 monjes. Con excepción de Tanzong, quien aceptó el rango de general, los demás siguieron su vida rutinaria de leer sutras y practicar artes marciales en Shaolin. El emperador obsequió a cada uno de los doce monjes un kasaya púrpura de seda (un conjunto de prenda que llevan los monjes budistas), con el deseo de que sirvieran al país en la guerra. Al mismo tiempo, permitió que, como excepción, Shaolin mantuviera cierta cantidad de monjes guerreros. En aquel momento Li no podía imaginar la trascendencia que su decisión tendría para el desarrollo ulterior de Shaolin y de las artes marciales. Esta excepción no sólo se mantuvo vigente en la dinastía Tang, sino que sobrevivió también bajo los reinados de Song, Yuan y Ming. La mayor parte de las notables contribuciones que hizo Shaolin a la seguridad nacional se produjeron durante la dinastía Ming (1368-1644), durante la cual los emperadores ordenaban con frecuencia a los monjes guerreros integrar agrupaciones punitivas para eliminar a los piratas extranjeros que amenazaban la costa sureña. Hay un dicho en China según el cual "todos los géneros de artes marciales provienen de Shaolin". Dicha frase se origina en el hecho de que por mucho tiempo Shaolin fue lugar excepcional donde se permitía practicar artes marciales y teorizar al respecto. No en balde el templo actuaba como imán sobre muchos maestros de alta habilidad, que procuraban intercambios profesionales. De esta manera, Shaolin dio lugar a un sistema completo de artes marciales en término de teoría, práctica, método y habilidades. Las artes marciales de Shaolin han desempeñado un papel insustituible para la sucesión y el desarrollo de dichas artes en China. Shaolin es considerado no sólo cuna de la secta Chanzong de budismo, sino también un lugar sagrado de las artes marciales.
  Bastón de Shaolin
El arte marcial de Shaolin abarca varios tipos de ejercicios: el ejercicio exterior se ejecuta para dominar los movimientos fijos; el ejercicio interior se destina a incitar la energía vital; el ejercicio duro se practica para elevar capacidad de soportar golpes; el ejercicio ligero es para aumentar el sentido de equilibrio; y el ejercicio suave ayuda a elevar la flexibilidad y resistencia. Las artes marciales de Shaolin abarcan cerca de 40 tipos de boxeo y diferentes habilidades en el uso de múltiples armas, como son el bastón, el sable y la espada. El juego de bastón es el elemento más representativo de Shaolin. Entre las armas antiguas, el bastón es el "antepasado de todas las armas", porque fue la primera herramienta utilizada por los seres humanos en la lejana antigüedad y del mismo derivaron otras armas similares, tales como la lanza, la pica y la jabalina. El uso del bastón puede servir de lección básica para emplear otras armas. El garrote también es una poderosa arma, especialmente cuando se enfrenta a una multitud de enemigos. Cuando los 13 monjes de Shaolin ayudaron al rey de Tang, utilizaron esta arma sencilla pero efectiva. En la dinastía Ming (1368-1644) los monjes guerreros de Shaolin también la utilizaron en la lucha contra piratas. Previamente, el bastón había sido objeto de rito del budismo, y los monjes lo usaron para castigar al enemigo sin matarlo. Hay un dicho chino, "La lanza mata a uno; el bastón derriba a una multitud". La mentalidad de budismo se refleja en el uso de garrote, que se destina sólo a vencer al enemigo sin herirlo. En realidad, este concepto también existía en tiempos antiguos. El famoso estratega militar Sunzi mencionaba su teoría en El Arte de Guerra: "El arte supremo de la guerra deberá ser dominar al enemigo sin pelear".
  Moral de las artes marciales
El moral es una parte importante de las artes marciales en China, que debe ser observada por todos los que las practican. En la esencia de dichas artes subyacen virtudes como la benevolencia, la justicia, la cortesía, la sabiduría, la sinceridad y la valentía. Las artes marciales comenzaron a dividirse en diferentes escuelas, de acuerdo con sus propios métodos y teorías, que coincidían, sin embargo, en propugnar la moral como primera exigencia para quienes se dedicaban a su práctica. La doctrina expresaba: "Uno aprende la cortesía antes de aprender una habilidad, y respeta la moral antes de practicar las artes marciales". En el Templo Shaolin había doctrinas más estrictas, incluidas las "diez prohibiciones", cuyo contenido es: los que no tengan buena conducta ni buen estado psíquico no podrán aprender el Kungfu de Shaolin; los discípulos no deberán cometer actos prohibidos como el robo y las peleas; al practicar las artes marciales, deberán evitar la pereza, la jactancia, la impaciencia, el exceso, el hedonismo, la arrogancia, la hipocresía, la falta del respeto al maestro y el atropello a los débiles; además se prohíbe la desobediencia de edictos imperiales, quiere decir, cuando el gobierno solicite soldados en favor del país, todos deben dar el paso al frente decididamente. A diferencia de las artes marciales modernas, las antiguas no se consideraban deporte competitivo, ni representación espectacular para la escena, sino habilidad para el combate, forma de derrotar al rival. Los conjuntos de movimientos se idearon con la intención de dotar del máximo de fuerza a cada hueso, músculo y nervio. Algunos movimientos sólo someten al enemigo, mientras que otros pueden matar. Sin embargo, un maestro que se apegue a la moral siempre se mostrará cauteloso para emplear movimientos pesados, aún en momentos urgentes. En la doctrina marcial de Shaolin se prohíbe atacar los ocho puntos cardinales del cuerpo, porque de hacerlo se puede causar graves daños corporales. El discípulo de Shaolin que violaba la doctrina o moral marcial era expulsado del monasterio para siempre. Características de Shaolin
A través de la larga historia de desarrollo de las artes marciales, se formaron muchas escuelas teóricas. Entre las más representativas cabe mencionar a Shaolin (originada en el norte) y la Wudang (originada en el sur y famosa por el boxeo taiji y el boxeo de ocho diagramas). La diferencia entre las dos no sólo reside en su origen y su zona de influencia, sino también en el estilo y movimientos que emplean. Por estas diferencias, el arte marcial de Shaolin fue llamado kungfu externo y la Wudang, kungfu interno. El Kungfu externo, con sus movimientos rápidos y agresivos, es ofensivo, mientras que el Kungfu interno, con movimientos más lentos y suaves, es defensivo. El arte marcial de Shaolin da importancia tanto a su forma de movimiento como al ejercicio de fuerza interior, como bien se desprende de las reglas del monasterio: "Formar un cuerpo sólido en el exterior y preparar una potente energía en el interior". El Kungfu de Shaolin enfatiza mucho la fuerza del puño, considerando que si no se hacen ejercicios continuados para preparar la energía interior, el puño será débil. En el ejercicio, la fuerza interior se acumula a través del reajuste del aliento y la meditación. En la lucha práctica, el reajuste de aliento también es importante para el movimiento.



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